MP
El hecho de venderse a uno mismo no tiene grandes secretos: hay que conocer el “producto” y mostrarlo a los demás presentando su mejor imagen. La idea, obviamente no es ni mentir ni exagerar, sino sólo resaltar nuestros puntos fuertes.
Para eso, lo más importante es conocerse uno mismo. Debemos tener muy claros nuestros defectos, virtudes, fortalezas y debilidades. Sí, hay que ponerse “administrativo” y realizar una especie de FODA de uno mismo. Una vez que esto esté definido comenzamos a “corregir” esos defectos y a “mejorar” esas virtudes.
Cuando uno habla de marketing personal, entonces, decimos que es como armar un paquete completo, es decir, preocuparnos por todos los aspectos de nuestra vida. Debemos concentrarnos en nuestro aspecto físico, espiritual, familiar, amical, profesional, económico, etc. En cada una de estas áreas habrá detalles para cambiar.
El hecho de venderse a uno mismo no tiene grandes secretos: hay que conocer el “producto” y mostrarlo a los demás presentando su mejor imagen. La idea, obviamente no es ni mentir ni exagerar, sino sólo resaltar nuestros puntos fuertes.
Para eso, lo más importante es conocerse uno mismo. Debemos tener muy claros nuestros defectos, virtudes, fortalezas y debilidades. Sí, hay que ponerse “administrativo” y realizar una especie de FODA de uno mismo. Una vez que esto esté definido comenzamos a “corregir” esos defectos y a “mejorar” esas virtudes.
Cuando uno habla de marketing personal, entonces, decimos que es como armar un paquete completo, es decir, preocuparnos por todos los aspectos de nuestra vida. Debemos concentrarnos en nuestro aspecto físico, espiritual, familiar, amical, profesional, económico, etc. En cada una de estas áreas habrá detalles para cambiar.
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